sábado, 13 de agosto de 2011

Ilusiones, las mías



  Estoy cansada. Harta de que ese futuro que veía a tu lado,
cada vez lo observe peor. La esperanza de ese final contigo, la esencia que dejaste, fruto del elíxir prohibido, ese cálido y apetecible amor que maduró dentro de mí, creo que aún no resuelto, ¡PORFAVOR! No sabes lo mucho que te deseo, anhelo poder sentir tu pasión, tus besos, aroma alcohólico, sabor Malboro, Camel…sabores nocivos, como no, viniendo de alguien como tú, pero… ¿Y qué? A mi ya no me importa, sólo quiero volver a esas frescas tardes de invierno, aburrirme y subir a tu casa, y salvar el mundo, y así, estar a pocos metros de una acera cerca de “le Tour Eiffel”. También quiero aparecer en esa discoteca donde nos cruzamos por primera vez y volver a bailar contigo, y que me mires como aquella vez. Pido demencia a tu lado, pero sólo la necesaria, y de la sana, de esa que no tiene perjuicios ni daños, por pedir, exijo caricias, a todas horas, felicidad por exceso, por pedir, que todo esto únicamente venga de ti

No hay comentarios:

Publicar un comentario